Los artículos que hemos visto hasta ahora se han centrado en darte consejos para que consigas prepararte y realizar una presentación exitosa de la manera que mejor se adapte a ti y a tu público.
¿Pero qué ocurre cuando la charla o la das tú solo? ¿Qué ocurre si la exposición a la que te enfrentas es grupal?
Existen diferentes formas de abordar una situación así, por lo tanto, aquí van mis recomendaciones para que decidáis entre todos cómo presentar una exposición en grupo:
1. Organizar la exposición – Trabajo Grupal
Índice de Contenidos
Vamos a partir de la base de que muchas presentaciones en grupo van acompañadas de la creación de un trabajo escrito que después hay que exponer, como puede ser el caso del instituto o la universidad.
Lo más común en estos casos suele ser repartir las secciones entre los integrantes del grupo y después que cada cual busque la información al respecto y la escriba de forma individual. Bien, pese a que esta pueda ser una estrategia válida para el trabajo escrito, a la hora de realizar la presentación puede generar ciertos inconvenientes:
Falta de información entre los integrantes
Si cada cual sólo busca información y se aprende su parte, a la hora de las preguntas es muy posible que no puedas relacionar los conceptos de las distintas secciones entre sí, ya que de la parte que no es tuya sabrás exactamente lo mismo que lo que tu compañero le ha explicado al público.
Cómo solucionarlo: Aseguraos de que todos los integrantes participan en el proceso de preparación de cada sección lo máximo posible.
Idealmente lo mejor sería que todos leyeseis todas las fuentes de las que vais a extraer información, pero ya que esto lleva muchísimo tiempo y posiblemente decidáis repartir el trabajo, al menos podríais leeros entre todos las fuentes más importantes y realizar entre el grupo una pequeña roda de preguntas, así como que cada integrante le explique al resto lo que ha leído.
De esta manera, aunque al final toda esa información no llegue al trabajo definitivo, todos sabréis más o menos lo mismo y claramente más que el público, lo que os dará la habilidad de defenderos antes cualquier pregunta.
Falta de homogeneidad
El problema de que cada uno escriba su parte y después simplemente las juntéis, es que cada individuo tiene su manera de escribir y expresarse, por lo que puede resultar en un trabajo sin cohesión y con carencia o exceso de conceptos y explicaciones.
¿Por qué esto último? Porque puede que en tu sección haya términos que desarrollas, pero que ya estaban previamente explicados por un compañero, o puede que algunos integrantes tengan tendencia a realizar explicaciones más cortas o largas que los demás y esto podría resultar en un trabajo descompensado.
Cómo solucionarlo: Nuevamente lo ideal sería que todos estuvieseis presentes a la hora de redactarlo e ir aportando entre todos las frases para que mantengan un estilo y cohesión similar a lo largo de todo el texto. Si esto no es posible y cada uno vais a aportar una sección, al menos reuníos para leerlo, detectar estilos distintos y modificarlo entre todos.
2. La presentación grupal – Como hacer una buena exposición oral
A la hora de exponer, podemos encontrar hasta tres modalidades distintas:
Representante
En algunas charlas, por mucho que el trabajo haya sido grupal, el organizador del evento (incluyendo profesores) no quiere ver a cinco personas sobre el escenario y prefiere que elijáis a un representante de grupo para exponer en nombre de todos.
Si este es vuestro caso, a los que no os haya tocado exponer no penséis que vuestro trabajo ha terminado. Sed un equipo y participad en la elaboración de los elementos visuales, aportad ideas para la originalidad de la charla, asistid a los ensayos y realizad preguntas (incluso aunque ya sepáis la respuesta). Y si te ha tocado ser el representante, te invito a que eches un vistazo a la web, ya que está plagada de consejos para que puedas presentar de manera eficaz y exitosa.
Individual por secciones
En esta modalidad todo el grupo participa en la exposición, pero cada uno habla de una sección concreta. Una de las cosas más importantes que tenéis que tener en cuenta en esta modalidad es la cohesión entre las diferentes partes, lo cual podemos apreciar a diferentes niveles.
> Powerpoint. A nivel individual siempre te voy a decir que generes un power point con el que te sientas cómodo y que te ayude en tu explicación. Por lo tanto, mantengo que nadie más que tú debería tomar la decisión final de cómo organizar y desarrollar tu parte de la presentación. Dicho esto, hay dos puntos en los que deberíais mantener una coherencia a la hora de exponer vuestro contenido visual.
Por una parte, tenemos el diseño: consensuad entre todos un formato común para el ppt, de manera que los colores, las letras, los fondos, etc. se mantengan homogéneos. Y por otra parte tenemos el formato: no puede ser que una sección esté plagada de letra, otra sólo con imágenes y otra con esquemas, por ejemplo. Encontrad un equilibrio entre todos con el formato que mejor se adapte a la información que queréis transmitir.
> Los puntos de diferenciación de la exposición. Seguimos con la premisa de que no presentes nada con lo que no te sientas a gusto. Pero esto no implica que una sección pueda estar plagada de humor o dinamismo o cualquier acción que incluya al público y otra sea completamente seria. Lo mejor es que toda la presentación tenga la misma tónica para que realmente haya una sensación de grupo.
Mi recomendación es que entre todos diseñéis y planeéis estos momentos de diferenciación. Eso sí, aseguraos que cada persona se sienta cómoda con lo que habéis pensado para su sección. Es decir, si una persona no se le da bien contar chistes, no le pongáis un chiste en su sección, buscad otra manera con la que poder resaltar ese momento de la charla.
Grupal
Todos los miembros hablan y participan en todas las secciones. Personalmente esta modalidad me encanta ya que da mucho juego y desde el principio transmite una sensación de dinamismo. Es algo tan sencillo y complicado a la vez, como interactuar no sólo con el público sino también con tus compañeros. De esta manera tu audiencia tendrá la sensación de participar en una conversación. Aquí van algunos consejos por si os atrevéis a dar el salto a este formato.
> Preparación. Si de normal ya es importante una buena preparación, en una exposición grupal de estas características lo es aún más. Todos los miembros debéis estar muy coordinados, casi como si fuese una función de teatro, para saber quién va a decir qué y qué concepto va después de cuál otro. En esta modalidad da una imagen pésima que de repente nadie diga nada porque no sabéis a quien le toca hablar.
> Formato dinámico. No tenéis por qué hacerlo, pero realmente es un formato que da pie a ni siquiera llevar un Power Point y a realizar acciones didácticas que incluyan al público. De esta manera, les haréis cómplices del dinamismo que se genere.