Una hipótesis es una suposición lógica provisional que se formula con el objetivo de otorgar una posible explicación a un fenómeno y que necesita de la validación o descarte en el contexto de una investigación científica.
Características de una Hipótesis
Índice de Contenidos
La propia definición de este término nos presenta una serie de características innatas de la hipótesis:
➊ Suposición
La hipótesis no es una afirmación verdadera y contrastada, sino una asunción derivada de información previa.
➋ Lógica
En este caso no sirve relacionar el batir de las alas de una mariposa en Europa con un tornado en Oceanía. La relación propuesta entre los diferentes elementos de la hipótesis ha de estar basado en indicios previos.
Es decir, sería absurdo formular la hipótesis “la salud estomacal de los niños depende directamente del color de las grúas del ayuntamiento” porque no existe ningún tipo de relación coherente entre los dos elementos de estudio (la salud de los niños y las grúas).
Sin embargo, podríamos formular la siguiente hipótesis: “La salud estomacal de los niños depende directamente de los hábitos alimenticios de los padres”. Ya probaremos si es una suposición real o no, pero al menos que los elementos compartan espacio, tiempo, costumbres, etc. da pie a que no se trate de una asunción descabellada e inverosímil.
➌ Provisional
No es una verdad, ni una afirmación, sino un supuesto que deduces por información previa. Por lo tanto, queda pendiente su validación. En el momento que se corrobore dejará de ser una hipótesis para pasar a ser una tesis. También es posible refutar una hipótesis, lo que desencadenaría la necesidad de formular una nueva que pudiera explicar el fenómeno de estudio en cuestión y que por supuesto, también estaría sujeta a validación.
¿Cómo Plantear una Hipótesis?
En muchas ocasiones comenzamos a investigar sobre un tema con la hipótesis de trabajo bien clara. Pero esto no siempre es así. Puede que hayamos empezado a investigar donde otro miembro del grupo lo dejó, o que tengamos algunos resultados dispersos, o que nos haya fallado por completo la hipótesis original, o que nos hayamos desviado mucho de ella.
Sea por el motivo que sea, es posible que a la hora de redactar tu tesis aún no tengas clara la hipótesis. Así que vamos a establecer pautas para poder encontrarla:
Comienza por hacerte esta pregunta, ¿de qué trata tu proyecto? De la relación entre X proteína y Z enfermedad por ejemplo. Con esto ya tienes enmarcadas tus variables principales, pero aún no es una hipótesis.
¿Qué has descubierto en tu estudio?
- Que la función Y de la proteína X es necesaria para mantener el correcto funcionamiento del órgano W.
- Que la función Y de la proteína X falla en la enfermedad Z.
- Que en la enfermedad Z se produce falta del elemento A y eso afecta a la función Y de la proteína X.
Con todos esos descubrimientos puedes crear una frase condensada y concreta que será tu hipótesis:
Como puedes ver es posible formular hipótesis ligeramente distintas teniendo los mismos descubrimientos. A simple vista ambas son correctas, sólo cambia el foco de los elementos. Si tu trabajo se centra principalmente en la proteína X su función Y, la segunda hipótesis es más correcta. Si tu foco es en realidad el elemento A, entonces usarías la primera.
¿Cómo Redactar una Hipótesis?
Una hipótesis se formula de manera afirmativa, en una única frase y de la forma más concreta posible.
Por ejemplo, del apartado anterior podrías haber extraído una hipótesis de cada uno de los descubrimientos de tu estudio. Pero elegir cualquiera de ellas en vez de un compendio de todas, crearía una hipótesis demasiado generalista, coja y que no recoge correctamente todo el estudio.
¿Cuántas Hipótesis Pueden Surgir en una Investigación?
Depende. Primero de todo, asegurarte de que esto es real. Es muy posible que una de las hipótesis que has planteado sea la hipótesis general que engloba todo el proyecto y las otras sean subhipótesis, o que todas a las que has llegado sean subhipótesis y te falte trabajar en la hipótesis global.
Las subhipótesis (SH) nacen de la hipótesis, son las pequeñas piezas o pasos que necesarios para validar y poder verificar la hipótesis.
➊ La función Y de la proteína X falla en la enfermedad Z (SH1)
➋ La falta de elemento A afecta a la función Y de la proteína X (SH2)
➌ En la enfermedad Z hay falta de elemento A (SH3)
➍ El fallo de la función Y de la proteína X en la enfermedad Z se debe exclusivamente a la falta de elemento A (SH4)
➎ El fallo de la función Y de la proteína X afecta al órgano W (SH5)
Todas estas subhipótesis pueden englobarse en la hipótesis del apartado anterior.
Ahora bien, puede efectivamente que tu tesis tenga secciones distintas e independientes y que por lo tanto necesites formular una hipótesis para cada uno de esos apartados.
Por ejemplo, si en una parte de tu tesis te enfocas en el papel de la proteína X y en su función Y en condiciones fisiológicas con el fin de caracterizar en mayor profundidad este proceso y la otra parte de la tesis cambia al papel en enfermedad.
Si es tu caso, trata tus secciones de manera independiente y encuentra la hipótesis en cada una de ellas igual que en la sección anterior.
La Hipótesis General – Cómo Hacer una Hipótesis de Investigación desde 0
Toda hipótesis nace de información previa que existe en el campo. Y sobre todo, de la falta de ella. Son conjeturas que intentan explicar las carencias en el conocimiento sobre un tema y por ello es importante leer revisiones de tu tema de estudio.
Si te interesa la proteína X, cuando comiences a recopilar información te darás cuenta que tiene las funciones Y1, Y2, Y3… de las cuales se sabrá más o menos. También puede que encuentre que la proteína X se relaciona con la enfermedad Z, aunque quizá aún no haya nada determinante.
Así, con la información que vayas obteniendo, comenzarás a tener pequeñas piezas en tu poder que te ayuden a especular acerca de tu temática y finalmente formular una hipótesis.
No te desesperes si no consigues encontrar todos y cada uno de los elementos (A, W, X, Y, Z) desde el principio, ya que son variables que irás añadiendo a medida que tu investigación avance y te lleve por un camino u otro.
Verificación de Hipótesis – ¿Qué Hago si mis Resultados Indican que la Hipótesis Inicial es Errónea?
No pasa nada, las hipótesis son plásticas y pueden variar y ser reformuladas constantemente. No hay que obcecarse en intentar cuadrar tu hipótesis sea como sea. No. Si tu hipótesis sugería el elemento B como mecanismo y resulta que no es el B, ni el C, ni el D, sino el A, ya está. Eso si consigues descubrir y probar que es A. Si no lo consigues, simplemente en tu hipótesis final de tesis no aparecerá ese parámetro.
Ojo, con esto no quiero decir que en ambos casos dejes fuera de la redacción de la tesis esos experimentos. Los resultados negativos también son muy importantes en la investigación. Además, descartan opciones y te aportan ideas.
Así que por mucho que en tu hipótesis final no menciones que “la falta de función Y de la proteína X no se debe al elemento B, C, D, sino al A”, añádelos a tus datos. Cuando redactes los resultados uno de tus apartados puede llevar ese título para que muestres las diferentes opciones que has tenido en cuenta y que has descartado mediante experimentación.
Diferencia entre Hipótesis y Objetivos
A la hora de redactar los objetivos del proyecto, éstos pueden llegar a ser confusos hasta el punto de formularlos como hipótesis.
Lo cierto es que las ideas que encierran los objetivos son iguales o muy similares a los de las subhipótesis que has visto más arriba. Se trata de encontrar y querer validad las pequeñas piezas que nos llevan a formular la hipótesis.
Tanto si decides plasmar esas ideas como objetivos o como subhipótesis, necesitas redactarlas acorde a la sección en la que las has incluido.